desperté enredada

A veces me despierto con la cabeza enredada de la misma manera en la que mi cuerpo esta enredado en mis sabanas, me despierto con la tenue luz que entra por mi ventana, a veces es más intensa en mañanas nubladas como hoy, esa tenue luz me susurra tu nombre, y por más que trato de ignorarla, y me enredo una y otra vez en mis sabanas, no dejo de pensarte, la luz sigue avanzando sobre mi cama y no importa que sea tenue, no importa que avance de a poco, cada vez estas mas aquí, has avanzado poco a poco hasta que me doy cuenta que con solo moverme ya no puedo dejar de pensar en ti.

Y entonces todo se viene sobre mi como un remolino, desde la manera en la que te conocí, hasta tu risa, la manera en la que explicas algo y como mueves tus manos, tu aroma, y tus besos, y todas esas cosas que hemos hecho juntos, tus palabras,…de repente ya no sé si quiero abrir los ojos, porque al abrirlos descubriré que no estas, y aunque con los ojos cerrados lo sé, estas en mi mente y aun te estoy viendo. Entonces por momentos antes de empezar el día prefiero verte, verte un momentito… a través de mis recuerdos… donde siempre estas.

Y hoy en específico pensé en la textura de tu piel, me gusta su color… me gusta que sea blanca, me gusta su textura tan suave en algunas partes y áspera en otras, me gusta como se ve tu piel y mi piel juntas, me gusta el aroma de tu piel y la manera en la que se hace agua.  Me gusta tu piel, casi tanto como me gustas todo tú…